¿Todos tenemos algo de TOC?
"Todos tenemos algo de TOC"
"Tengo un TOC con el orden"
Estas son algunas de las frases que escuchamos cotidianamente cuando se hace referencia al TOC (trastorno obsesivo compulsivo), pero en realidad ¿qué es el TOC?
El TOC es uno de los 20 trastornos más incapacitantes según la OMS.
Ser ordenado, tener algún método para hacer algo, bañarme seguido o lavarme los dientes tres veces por días no necesariamente es un TOC.
El TOC es algo serio, que genera mucho sufrimiento en los niños y adolescentes y afecta significativamente las distintas áreas de su vida.
Las temáticas pueden ser tan variadas como personas hay con TOC. Las obsesiones (pensamientos intrusivos que no quiero tener y que generan un gran malestar) pueden tener contenidos distintos, no solo son de simetría, orden o limpieza, como más se conocen. Otros contenidos menos conocidos de obsesiones pueden ser de agresividad (pensar que le puedo hacer daño a otros o a mí mismo), de perfeccionismo (algo está mal hecho aunque se vea claramente que no es así) o de variados temas (pensar que algo no querido pasará si no hago tal o cual cosa, pensamientos de la suerte o relacionados a la sexualidad).
Las obsesiones se sienten como una realidad inapelable, aún sabiendo cognitivamente lo disparatadas que pueden ser o reconociendo la baja probabilidad de que sucedan. Estas activan emociones intensas como ansiedad o miedo, que se buscarán neutralizar con las compulsiones.
Muchas veces, los niños o adolescentes con TOC sienten vergüenza por el contenido de sus obsesiones y no logran pedir ayuda.